domingo, 6 de enero de 2008

DESIERTO PINTADO, EL (Painted desert, the). 1931


Dos hombres, ya adultos, amigos desde hace muchos años, pero cada uno de ellos con mucho carácter, se encuentran en pleno desierto, dentro de una carreta abandonada, un bebé.
Se trata de un chico y cada uno de ellos dice que lo ha encontrado primero y es su padre. Discutirán y, al final, uno se quedará como amo de la tierra donde lo encontraron, que es la única que tiene agua para el ganado, y el otro se llevará al pequeño.
Pasados los años, el chico se ha hecho un hombre, y es un buen muchacho. Como quiera que desea que los antiguos amigos recuperen la amistad, intentará ganarse una estratagema para ello. Pero no será fácil pues el odio se ha enconado en los dos hombres, tercos como mulas.

Western francamente entretenido, meritoriamente dirigido por Howard Higgin. Y lo digo con sorpresa pues estaba seguro que resultaría un poco rollo dados los años transcurridos desde su realización, nada menos que setenta y cuatro.
Pero está bien dirigida y, además, contó con un presupuesto, escaso para lo que se estila hoy en día, pero muy bien aprovechado, con escenas de acción bien resueltas en su espectacularidad y realismo (las explosiones en la mina, los carros corriendo por el desfiladero...).



Clark Gable tuvo aquí su primera oportunidad en el cine hablado, pues en el mudo ya había hecho sus pinitos. Gustó por sus rudas maneras y su apostura. Y a partir de ahí, y sobre todo por el Óscar conseguido tres años después, a la fama para siempre.
Pero la película está protagonizada por un verdadero mito, William Boyd, acompañado por Helen Twelvetrees, William Farnum, J. Farrell MacDonald y Charles Sellon entre otro/as.

No hay comentarios: